Dejar que escape el tiempo

Ultimamente los días se me hacen rápidos, agitados, de escazas horas que se escapan en el momento que abro la puerta, bajo la cuesta pensando que ojala no salga el vecino e inicie una conversión por 20 minutos de la cual no me importa nada; una vuelta, otra cuesta, la calle, la manguera, otro maldito vecino que no sabe que la acera no es parqueo, el guarda que si no me nota no saludo... caminar mas rápido aunque el suelo este resbaloso y justo cuando voy a dar la vuelta y pienso que lo he logrado a toda velocidad pasa el bus; ya en la parada no soy el primero en llegar si no el ultimo.

Pensar que decidí vivir largo para escapar de todo y sin embargo la realidad es que vivo esclavizado al todo, el resultado de mi desición son mas horas de sueño en el autobús que en mi cama, mas calles, cuestas, caminar siempre rápido.

El placer de dedicarme a mis cosas se ha visto reducido, sin embargo cuando dedico tiempo a ellas trato de detenerme y ver alrededor, no dejar que se me escapen las horas, pienso que si los días se van en un parpadeo un día despertare y la juventud me abra abandonado, tal vez la salud, tal vez mis seres queridos y no puedo dejar que eso suceda. Hoy ha sido un muy buen día aunque acabo mas rápido de lo que hubiera deseado.

Mañana quisiera despertar y descubrir mil cosas acerca de mi, quisiera bajar la cuesta sonriendo y que no me importe si sale el vecino, quisiera tener la certeza de que no estoy dejando pasar el tiempo, que no estoy siendo un tonto que esta dejando pasar la vida de lado sin disfrutarla en todo sentido. Tweet