Esta es la época en la que andamos felices, en gran parte por que nos pagan el Aguinaldo, la recompensa de un año breteado, días buenos y malos - Un salario extra que no es un regalo, en la mayoría de los casos lo tenemos bien ganado, con el sudor de cada uno y por eso mismo no es excusa volvernos millonarios por 31 días.
No quiero ser aguafiestas ni pretender ser la persona mas centrada - yo también me vuelvo loco y aunque raramente ando antojado de comprarme cuanta carajada veo; Diciembre logra hacer una grieta en mi dique económico, me suaviza el codo!.
Navidad es una época intoxicante, queremos darnos muchos gustitos, mucha fiesta con guaro y si, uno se merece un chineo pero hay que ser conscientes de que la situación en el país no esta bien y seguramente va a ponerse peor.
No podemos ahogar las penas en guaro ni tampoco peinarlas para luego ver que hacemos con la excusa de que fue un chineito merecido. Ahorrar es la cantidad de dinero que estoy dispuesto a sacrificar, no "lo sobra lo guardo" por que con esa filosofía terminamos hasta pidiendo prestamos con tal de irnos una semana a la playa y vivir como reyes tan solo para regresar a la realidad y vivir como miserables.
Como todo en la vida, Balance. Yo lo que hago es que aparto un porcentaje del aguinaldo y me olvido que existe, antes lograba ahorrar casi todo pero ya ven, la cosa cada vez se pone mas dura - lo reservo para un proyecto futuro, cual sea, la idea es contar con un "colchón" como dice mi Mama.
No compren por calentura ni impulsivamente - hay que ver mas allá del fin de año, hay que pensar en que esto es como la rueda donde corre el hamster, no tiene fin y si no conservamos energías inevitablemente vamos a caer rendidos en vez de darnos un descanso necesario.
No se trata de trabajar como caballo once meses y volverse loco uno, para regresar a matarse pagando las deudas de ese "safis".
En cierto modo sé que es pedir demasiado pero al menos cuando en enero estén chillando por la falta de dinero este men se lava las manos.